Por: Antonio Flores Gavilán
Dentro de los acontecimientos que se estan dando en pleno desarrollo esta la crisis que ha sido desatada el pasado 28 de junio, dia en que el Presidente Constitucional Manuel Zelaya fue sacado por un golpe militar al mas tradicional estilo del Siglo XX, donde a apartir de ese momento se ha desatado una crisis politica en el hermano pais de Honduras, donde el Gobierno de Facto encabezado por Micheletti esta tratando de atentar contra la vida y salud del Presidente Constitucional de Honduras para darle una solución a esta crisis que ya va por los tres meses. A manera de reflexión afirmamos que a estas alturas del Siglo XXI no se puede tolerar un golpe de Estado de esta naturaleza, y menos tratar de rociar con gases toxicos como si se tratase de un vil cucaracho al legitimo representante de los hondureños, desde aqui nuestro mas energico rechazo a este tipo de acciones contra el Presidente elegido democraticamente por el Pueblo de Honduras, quien en ultima instancia sera quien lo juzgara, pero de ninguna manera un gobierno de facto que no tiene el derecho de terminar con un regimen democratico.
Aqui les dejamos esta ultima entrevista al Presidente Constitucional de Honduras Manuel Zelaya realizada hace algunas horas que el Diario la Prensa desde Nueva York via telefonica.
A pesar de las medidas que ha tomado el gobierno de facto de Honduras para sacar al presidente derrocado Manuel Zelaya de la embajada de Brasil en Tegucigalpa, ayer el mandatario aseguró que no piensa dejarla y que tiene esperanza de llegar a un acuerdo pacífico en los próximos días.
En una entrevista con El Diario/La Prensa desde su encierro de nueve días en la embajada brasileña, Zelaya apuntó: "Tiene que haber una salida. No podemos vivir en una convulsión social".
Sin embargo, Zelaya indicó que no piensa salir de la sede diplomática para resolver la crisis, a pesar de que el gobierno de facto ha dado una semana al gobierno de Brasil para que decida si da asilo político a Zelaya o retira el estatus diplomático de la embajada.
"Debo de hacer todo el esfuerzo y someterme a todo el sacrificio que sea necesario con el fin de darle un ejemplo al mundo de que los golpes de Estado no se aceptan", aseguró el presidente derrocado en una entrevista por teléfono.
Zelaya fue expulsado de Honduras el 28 de junio a través de un golpe militar. Cuando logró regresar al país el 21 de septiembre, en una operación clandestina después de varios intentos frustrados, se refugió con su familia en la embajada de Brasil.
Ayer, Zelaya reafirmó que no está considerando la posibilidad de salir de la embajada y asilarse en Brasil, la única opción que le ha ofrecido el gobierno de facto en lugar de su arresto.
Antes de que llegue la fecha en que el gobierno de facto dice que suspenderá el estatus diplomático de la embajada, Zelaya dijo: "Nosotros pensamos que se va a arreglar el problema".
Aunque sigue firme en su posición, el presidente admitió que se encuentra agotado por los ataques con gases tóxicos e intimidaciones de que son objeto los que se encuentran encerrados en el interior de la representación diplomática brasileña.
"De salud estoy bien. Pero estoy asediado, atacado, desprovisto de comida, rodeado por militares. No nos dejan visitas, no nos permiten hacer el diálogo nacional a que hemos convocado, y hay fuerte represión en contra de todos nosotros", dijo. Cuatro días antes, las fuerzas militares regaron la embajada con gases lacrimógenos.
"De salud estoy bien. Pero estoy asediado, atacado, desprovisto de comida, rodeado por militares. No nos dejan visitas, no nos permiten hacer el diálogo nacional a que hemos convocado, y hay fuerte represión en contra de todos nosotros", dijo. Cuatro días antes, las fuerzas militares regaron la embajada con gases lacrimógenos.
Ayer, buscando bloquear su comunicación con el mundo exterior, el gobierno de facto había saturado la embajada de ondas microondas que cortaban las llamadas. Zelaya logró hablar con El Diario/La Prensa por un teléfono celular desde una habitación protegida de dichas ondas electromagnéticas.
En la entrevista, el presidente derrocado defendió su decisión de regresar a Honduras, por la cual ha sido criticado por Estados Unidos, que cree que ha servido para elevar la tensión en Tegucigalpa, causando más enfrentamientos violentos entre manifestantes y militares y por lo menos tres muertes.
"Eso lo dicen los que dieron el golpe de Estado", respondió el presidente derrocado. "Yo no uso armas. No uso violencia. Uso un discurso pacífico. Sí de resistencia. Sí de desobediencia civil frente a un golpe de Estado", agregó desde su encierro, en el que está acompañado por unas 70 personas, entre las que se encuentran familiares y seguidores.
Zelaya denunció las acciones del gobierno de facto, que suspendió cinco derechos constitucionales y cerró los dos únicos medios opositores esta semana, Radio Globo y Canal 36. Las instalaciones de éstos fueron tomadas por los militares el martes de madrugada, pero los dos medios siguen transmitiendo noticias por la internet.
Sobre estas acciones del gobierno golpista, Zelaya dijo: "Esto desnuda la cara verdadera de la dictadura que se ha instalado en Honduras".
El presidente derrocado dijo que ha intentado dialogar con representantes de Micheletti, pero que sus emisarios le han presentado propuestas "absurdas".
"Ellos proponen que haya otro golpe de Estado y que se saque a Micheletti y que se ponga otro presidente externo, entonces eso no es aceptado por un demócrata como yo", aseveró.
El presidente derrocado dijo que ha intentado dialogar con representantes de Micheletti, pero que sus emisarios le han presentado propuestas "absurdas".
"Ellos proponen que haya otro golpe de Estado y que se saque a Micheletti y que se ponga otro presidente externo, entonces eso no es aceptado por un demócrata como yo", aseveró.
Preguntado por el Pacto de San José, y si el gobierno de facto ha mostrado interés en ratificarlo, respondió: "Por el momento no han manifestado interés, pero es un camino pacífico a la solución a la crisis".
Zelaya aseveró que el gobierno que más ha estado ayudando es el de Estados Unidos, pero reiteró su oposición a una intervención estadounidense porque ello significaría una solución de la crisis por la fuerza.
Zelaya aseveró que el gobierno que más ha estado ayudando es el de Estados Unidos, pero reiteró su oposición a una intervención estadounidense porque ello significaría una solución de la crisis por la fuerza.
A pesar de sentirse exhausto, el presidente derrocado se mostró esperanzado.
"Ellos no tienen otro remedio de encontrar un entendimiento porque nadie los acepta, ni el pueblo ni la comunidad internacional; están solos en el mundo", concluyó.
"Ellos no tienen otro remedio de encontrar un entendimiento porque nadie los acepta, ni el pueblo ni la comunidad internacional; están solos en el mundo", concluyó.
Antonio.-
ResponderEliminarEstoy de acuerdo que los golpes de estado no son la solucion. Pero hay que recordar que Zelaya avasallo la constitucion que dice lo respalda haciendo ese plebicito ilegal, fue alli cuando los militares lo sacaron del poder ante la lentitud de los politicos del pais de hacerlo a la manera legal, lo cual ocurrio post factun.
Osea, si los politicos del pais hubieron actuado con agilidad, sacando a Zelaya del poder por haber incumplido con la Constitucion de Honduras, nada de esto hubiera pasado.
Recordemos que este Zelaya, que ahora se hace un abanderado de la democracia, estaba destruyendo la democracia de Honduras al querer implantar en Honduras al "Imperio del Socialismo del Siglo XXI" osea el modelo Chavista.
Ahora Michelleti es un patriota que le ha tocado comerse al sapo. Si los politicos hubieran actuado antes que los militares, Michelleti seria el "heroe".
Saludos,
David
Si pues Efectivamente, en realidad Zelaya quiso imponer el modelo alternativo bolivariano.
ResponderEliminarveremos que ocurre en este tema.
Siempre hay que recurrir pues cuando los politicos fracasan en su labor de combate ideologico, a algun patriota que haga el trabajo sucio, es decir terminar siendo fulmigador en la praxis, aunque no es esto moralmente aceptable, pero la Reality Politic impone lamentablemente muy a nuestro pesar estos procedimientos.